domingo, 14 de diciembre de 2014

Nota sobre el salario minimo


Nota sobre el salario mínimo

 

Luis Guillermo Vélez Álvarez

Economista, Docente Universidad EAFIT

Como es habitual en el mes de diciembre asistimos a la principal discusión económica de fin de año: la fijación del salario mínimo legal. Entre los economistas y responsables de la política económica no hay unanimidad sobre la conveniencia de esta intervención del gobierno en el mercado laboral. Sus partidarios lo ven como un mecanismo para aumentar el ingreso de los pobres y contrarrestar las imperfecciones del mercado laboral. Los que se oponen argumentan que el salario mínimo contribuye al desempleo, alienta la informalidad y que hay otras formas de ayudar a los pobres.  En cualquier caso, la legislación sobre salario mínimo está extremadamente extendida. Los países que carecen de ella – entre los que se encuentran Austria, Dinamarca, Finlandia, Suiza, Italia, Noruega y Suecia – son más bien la excepción. Todos los países de América Latina tienen legislación sobre salario mínimo, pero su cumplimiento efectivo, como puso de manifiesto un reciente estudio de la Organización Internacional del Trabajo, deja mucho que desear[1].

Figura 1
 
Según el procedimiento establecido en Colombia, el incremento anual del salario mínimo debe ser acordado unánimemente por el Consejo Nacional Laboral, en el que participan representantes de empleadores y trabajadores. En caso de no existir acuerdo, el Gobierno Nacional lo fija por decreto ejecutivo. En esa negociación o mediante ese decreto se determina el salario mínimo nominal para el siguiente año. Lo que ocurra con el salario mínimo real o la capacidad la adquisitiva de ese salario nominal, que es lo que es lo que importa en definitiva, dependerá de la inflación. En la figura 1 se compara la evolución de la tasa anual de incremento del salario mínimo con la tasa anual de inflación del Índice de Precios al Consumidor. Ostensiblemente, en el período considerado, el incremento nominal del salario mínimo excedió la inflación anual del IPC, lo cual se tradujo en un importante crecimiento del salario mínimo real, como se muestra en la figura 2.

Figura 2
 
La figura 2 muestra el Índice de Salario Mínimo Real. En la década de los 90 permanece casi estancado. El mayor crecimiento del salario mínimo real se produce a partir del año 2000, coincidiendo – lo que no es sorprendente - con un período de buen crecimiento económico, reducción del desempleo y baja inflación. Probablemente la legislación ayude, pero la mejora en el salario mínimo real y de las condiciones de vida de los trabajadores dependen del buen desempeño de la economía.

Finalmente, hay que referirse a la discusión siempre presente sobre el nivel del salario mínimo. ¿Qué tan alto o qué tan bajo es el salario mínimo y con relación a qué?

Un referente obvio es la línea de pobreza. A precios de 2014, las líneas de pobreza urbana y rural por habitante están en $ 230.633 y $ 137.792, respectivamente[2]. El salario mínimo mensual vigente en 2014 de $ 688.000, incluido el auxilio de transporte, equivale aproximadamente a tres líneas de pobreza urbana y a cinco de pobreza rural.  Dicho de otra forma, una familia urbana de 3 miembros y una rural de 5 deben tener para estar en la línea de pobreza 1 activo devengando el salario mínimo.  

Figura 3
 
Otra comparación interesante es la del salario mínimo con el PIB per-cápita que se muestra en la figura 4 para Colombia y otros países de América Latina.

Figura 4
 
En resumen: en los últimos 25 años el salario mínimo nominal se ha incrementado mucho más que la inflación; por ello el salario mínimo real creció un 43% en el período. El salario mínimo legal vigente en 2014 equivale a 3 líneas de pobreza urbana y a cinco de pobreza rural. El salario mínimo equivale aproximadamente a un 50% del PIB per-cápita.

LGVA

Diciembre de 2014.




[1] Marinakis, Andrés. Editor (2014) Incumplimiento con el salario mínimo en América Latina: el peso de los factores económicos e institucionales. Organización Internacional del Trabajo. Santiago de Chile, septiembre de 2014.
 
[2] DANE (2012). Misión para el empalme de las series de empleo, pobreza y desigualdad. Pobreza monetaria en Colombia: nueva metodología y cifras 2002 – 2010.